La promesa de un beso mariposa
enredado en barbas traviesas,
fecunda itinerarios del corazón viajero,
volando encima de unos
y rodando debajo de otros,
burlando los husos horarios
con nuestras voces desde lejos...,
Y desde cerca, es la promesa,
de arena y espuma bajo los pies
de esas palabras sin tiempo que
suenan y se escriben solas...,
Esas palabras hablan de mañanas con desayunos,
siestas compartidas, películas para ver juntos,
donde las caricias tendrían un jardín
para florecer a su antojo.
Lo cierto es que no hay certeza
mas allá de las sonrisas del alma,
detonantes de sueños nuevos y viejos
en este "ahora" que parece eterno
sólo cuando tu me hablas...
JLGQ. 27/10/12.